viernes, 7 de mayo de 2010

"He sido más un obrerete del rock que una estrella"



Después de 50 años, el famoso granadino Miguel Ríos se retira. Una mala noticia para todos aquellos que lo admiramos, ¿verdad?¿Para qué negarlo?. Se despido con la gira 'Bye, bye Ríos. Rock hasta el final',donde ha incluido tres conciertos en Granada, Madrid y Barcelona.
Miguel ha hecho un repaso de su carrera y dice que siempre ha hecho caso a una frase:
"rock hasta el final" porque, según cuenta, todo se lo debe al rock. Pero, según han ido pasando los años, considera que "hay muchas cosas que hacer después del rock".
"En España hemos sido más unos obreretes del rock que estrellas", afirmó Ríos. Ha señalado, además, que los tópicos del Rock le han dado igual."Excepto las grupis; eso es fantástico", bromeó Miguel.
Y es que eso de romper guitarras no va con Miguel. Respecto al rock en nuestro país, dice que "no ha caído tan bajo por estar tan alto".
Por cierto, ¿por qué en nuestro país es muc
ho más difícil ser músico que en otros lugares? "En España se tiende mucho a eso de pasar la reválida". "Hay menos indulgencia y cualquiera pueda tener un resbalón, porque he tenido discos mejores y peores".
Pero Miguel no ha olvidado sus raíces y ha tocado en Granda, el lugar donde nació. Allí dice que ha vivido los mejores momentos. "Allí pasé una infancia plena en una familia alegre". Esto una persona que logró cantar a los 70 años el Himno de la Alegría.
Pero, pese a que Miguel se ha "especializado" en el Rock, ha reivindicado otros géneros musicales.
"Siempre he estado abierto al mestizaje y he tratado de no repetirme", ha dicho Miguel, que ha recordado aquella etapa como el "Rey del Twist", pero como "un accidente".
Una de las "recetas" de Miguel es no tener miedo al fracaso.
"Intuyo que la gente se da cuenta de que hay una complicidad, pero no sé porque la decisión de que gusten unos u otros", afirma antes de precisar que su público está "un poco mosqueadillo" por su adiós a los escenarios. "Pero no quiero convertirme en una caricatura de mí mismo y no quiero verme peor de lo que merezco", afirma. "He hecho siempre cosas no habituales, y ahora me despido, marco mis tiempos, cuando lo habitual es que te despidan", dice una persona veterana que está encantada de aprender algo cada día. "Es cojonudo decir adiós; ahora cantaré con el que me deje", prosigue.
Miguel Ríos también defiende la llamada solidaridad roquera.
"Hoy en día corren tiempos más perros que nunca". "Hay gente que sufre innecesariamente, la riqueza está mal repartida y es todo tan sin sentido".
Respecto al
"bye, bye" a los escenarios (el 17 de septiembre en el Palacio de los Deportes de Granada; el 4 de noviembre en el Sant Jordi Club de Barcelona; y el 6 de noviembre en el Palacio de los Deportes de Madrid),Miguel se está preparando "ferozmente", como dice él, para estar fuerte y aguantar.
"Después de esto hay muchas cosas que hacer. Quiero seguir aprendiendo y me gusta escribir", dice Ríos, que colabora en bastantes medios escritos. Pero, la última pregunta, ¿cómo se mantiene en forma? "¿El secreto de mantenerme en forma? Tendrás que leerlo en mis memorias", concluye.

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