Crónica de la 1ª Carrera Popular Barrio de los Bloques

El título que mejor describiría lo que yo pasé ayer sería el siguiente: "Crónica de un infierno", y es que ayer, pese a conseguir otra victoria, lo pasé fatal: para que os hagáis una idea, llegué a meta afónico.
Bueno, pues a las 16:00, como ponía en el folleto, me presenté en las inscripciones, pero hasta las 17:00 no las abrieron (no se aclaraban con el ordenador). Una vez que estaba ya apuntado, mi padre y mi hermano se marcharon a buscar a mi madre, y yo me quedé allí por si decían algo de las categorías.
Mientras espereba, llegó Manuel Álvarez, de mi Club, y allí estuvimos un rato hablando.
Más tarde, ya se dio la salida de los más pequeños, los pre-benjamines (de 0 a 6 años), luego, los Benjamines (donde corría mi hermano), los alevines (10-11 años) y los Infantiles, donde, otra vez y como siempre (no doy pasado a Cadete), me tocaba correr a mí. Teníamos que dar tres vueltas a un circuito de 350 metros. Del Club Atletismo Zamora estábamos Bea, Steven y yo. Salimos y me escapo. Conseguí mantenerlo hasta el final, aunque tuve algún problemilla en el circuito (esta vez, errores míos, ya que casi me meto en la meta cuando nos faltaba una vuelta aún, casi me tienen que parar los de Protección Civil). Como Bea era la que iba detrás de mí, había momentos que oía pasos y, pensando que era ella, aceleraba. Pero era la gente calentando fuera del circuito. Cuando cogí la última recta, puse el dedo en el botón del cronómetro y, justo en la línea de meta, lo paré: 00:03:24.52 fue lo que tardé en hacer los 1.050 metros, es decir, a tres minutos y algo el kilómetro.
Luego, siguieron los populares (donde corrían muchos amigos míos) y, después, la entrega de trofeos.
Mientras preparaban las clasificaciones, se me acerca un chaval joven y me dice: "Hola". "Hola". "No sabes quién soy, ¿no?" "Pues no". "Soy Aguadín". Resulta que era uno de los amigos que tengo en Strands y me había conocido. Estuvimos hablando un rato.
Luego, estuvieron las distintas categorías en el podio. Cuando subí yo, hice dos veces la pistolita de Contador.