Creo que, en cierta medida, lo de pensar en el futuro es algo muy, muy relativo. No por el hecho de pensar en sí, sino porque nunca sabremos qué es lo que realmente nos va a pasar dentro de unas horas, días, meses o años. Es algo muy complicado esto de pensar en un futuro, precisamente por ese motivo. Sin embargo, creo que también está bien intentar organizar nuestra vida, tanto nuestro presente como nuestro futuro, quizá así nos resulte más fácil no conocer nuestro futuro, pero sí ser capaces de afrontar tanto el presente como el futuro.
La verdad, debo reconocer que, en mi caso, le suelo dar muchas vueltas a esto del futuro. En el caso del deporte, que suele ser el tema principal del blog, la verdad es que tengo bastante preocupación sobre mi futuro como deportista. Veo a muchos amigos y conocidos que están hechos polvo por el deporte. Unos, que en su día practicaron carrera a pie, ahora se encuentran montando en bicicleta, con alguna lesión que no les crea demasiado problema en su vida diaria y que les permite seguir haciendo otros deportes que no tengan tanto impacto sin apenas problemas, pero les resulta imposible ponerse a correr porque enseguida comienzan con los dolores. Conozco a otros que tuvieron que pasarse al ciclismo porque lo de correr se convirtió en algo insoportable por las lesiones o los dolores y que ahora, practicando ciclismo, se han reducido, pero siguen ahí, dando guerra, y por lo tanto, amargando la vida deportiva e incluso personal. También conozco a gente que lleva 20, 30 o incluso más años correteando y, aunque con algún que otro achaque, siguen ahí, compitiendo o, por lo menos, encandenando zancadas de forma casi diaria. En mi caso, no me gustaría verme dentro de unos años hasta arriba de lesiones, con dolores que no me permitan hacer deporte o llevar una vida normal. Me gustaría ser de los del último grupo, los que, aunque con alguna que otra molestia, pueden seguir haciendo sus rodajes y alguna que otra competición de 5, 10 o incluso media maratón. Soy consciente de que estoy en cualquiera de los grupos. Puede que dentro de unos años no pueda hacer deporte. Puede que sea de los que están hasta arriba de lesiones, pero pueden hacer deportes de poco impacto, como el ciclismo, o de los que, por alguna lesión, tuvieron que dejar de correr, pero pudieron seguir su vida deportiva como ciclistas. También puedo ser de los que siguen corriendo tras 30 años de práctica. Estoy en el bombo para cualquiera de esos grupos.
A mi, como deportista, ¿qué me gustaría? Pues no estaría para nada mal poder seguir corriendo durante unos cuantos años. Me gustaría hacer varias pruebas, primero a nivel popular y luego para ir a disputar. Por ejemplo, ir a correr alguna de las medias maratones de las que tanto me han hablado, como, por ejemplo, la famosa Behobia-San Sebastián, y entre las más cercanas, Salamanca, Valladolid, Palencia y, por supuesto, Zamora, la de mi tierra, la de casa, la que a mi como zamorano más me gusta, por supuesto. Una vez dominada la distancia de los 21 kilómetros, salir a disputar estas pruebas e intentar lograr una buena marca. Pero no solo pruebas de este tipo, también me gustaría disputar pruebas de 10.000, mi distancia favorita, y poder hacer alguna buena marca, poder competir alguna vez en la prestigiosa San Silvestre Vallecana, salir (y esto es un proyecto de futuro cercano) en la "Sansil" de Salamanca, un 10.000 rodeado de otros no sé cuántos atletas (aunque está muy de moda el término "runner", a mi me gusta más utilizar lo de atleta, soy una persona clásica, aunque creo que es más correcto utilizar la palabra inglesa para denominar a la gente que corre, pues lo de atleta es para la gente que practica atletismo, que tiene mucho más que correr). Y, cómo no, poder seguir haciendo cross. Qué bonitas, además de duras, me resultan estas pruebas. Me gusta hacer cross. He podido competir en los cercanos (Atapuerca, Valladolid, Cantimpalos, Venta de Baños, Aranda, Ávila, aquel que se hacía en el Prado Panaderos de Salamanca, en el de Valorio en Zamora, por ejemplo). He disfrutado entodos, cada uno tiene su encanto. Pero me gustaría volver más preparado, para ir más delante, probarme para ver hasta dónde llego. Ver si puedo rodar bien delante, entre los primeros clasificados. ¿Plantearme como objetivo llegar a un Nacional de cross? La verdad es que sería un buen objetivo. ¿Por qué no intentarlo? Dejemos que sea el futuro, el tiempo, quien diga lo que hay que hacer.
Pero, claro, la verdad es que esto lo he pintado muy bonito, y no sé si realmente podré cumplir todos mis objetivos. Están ahí las lesiones. No sé qué tipo de lesiones tendré a lo largo del tiempo, pero seguro que a lo largo de mi vida deportiva, la cual espero sea larga, tendré unas cuantas lesiones. Pero, como decía, no me gustaría tener que dejar el deporte por ellas. He visto a mucha gente con lesiones de rodilla (y, casualidades, muchos de ellos me han hablado de problemas en el menisco); también me han hablado de muchas lesiones musculares. Con algunas podré seguir corriendo, quizá con entrenamientos más tranquilos, pero seguir dando guerra corriendo. En el caso de que me tocara parar dentro en el futuro, reconozco que me gustaría seguir practicando deporte, con la bicicleta a poder ser. Me gustaría seguir practicando ciclismo. Lo que sí es cierto es que, dentro del ciclismo, no me gustaría salir a "pasear", usando el término como tal, sino a machacarme, a llegar cansado a casa. Es cierto que el ciclismo es un deporte muy complicado, que requiere muchísimo tiempo, pero nadie dijo que esto fuera fácil. También es verdad que es un deporte muy bonito y que realmente vale la pena. Pero, como decía, a mi no me gustaría salir en plan tranquilo, sino más bien a machacarme o, mejor dicho, me gustaría salir a entrenar con la bici para preparar marchas cicloturistas, no para competir, para eso están las competiciones máster, sino simplemente para poder pasármelo bien. Más o menos puedo comparar una forma y otra de ver el ciclismo, pues tengo contacto con gente que entrena sobre la bicicleta y gente a la que le gusta salir a darse una vuelta sobre el sillín por la ciudad. A mi me gustaría quedarme con los primeros, me llama mucho más la atención esa forma de ver el ciclismo aunque, por supuesto, considero que la bicicleta es un gran medio de transporte, pero una cosa no quita para la otra. Y la verdad es que, si tuviera que dejar de correr, algo que, como digo, no me gustaría, me encantaría poder practicar ciclismo como sustituto, y poder participar en diversos eventos deportivos de este deporte. Como ciclista me gusta más ir por carretera, así que prefiero las cicloturistas de esta modalidad.
Pero, ¿por qué pensar en negativo? No podemos saber nunca qué es lo que nos pasará en un futuro, y el deporte para nada es una excepción. Claro que me encantaría poder seguir cumpliendo con los objetivos que comenté más arriba, y con otros más cercanos. No podemos pensar que una lesión está al acecho, igual que tampoco podemos pensar que cuando salimos a la calle nos pueden suceder un montón de historias, pues no saldríamos a la calle, o que con la bici nos podemos caer, pues tampoco saldríamos a dar pedales. Así, voy a intentar pensar en positivo.
Sobre los objetivos más cercanos, está la carrera de Chema Martínez este sábado en Villalpando, sobre 10.000 metros. Allí competí en 2013, en el 5000, y la verdad es que me noté muy bien. Salió en torno a los 3.20 min/km, y conseguí llegar en segunda posición, tras Roberto Llana. Este año me animé porque podía hacer el 10.000, y la verdad es que tengo ganas. Si este año participa, espero que sí, será para todo un orgullo por lo menos decir que he calentado junto a Chema Martínez, porque lo de competir está complicadísimo. Aunque ya está retirado de la élite, sigue estando igual de fino que entonces, y seguro que llevará un ritmo muy, muy elevado. Qué grande es Chema. Mi objetivo personal es bajar de los 34.40 en 10.000, que hasta ahora es mi mejor marca. ¿Factible? No lo sé. Tras esta competición están Peñausende y la del Cerco de Zamora, la primera sobre casi nueve kilómetros y la segunda sobre 5000. Le tengo ganas a las dos, pero sobre todo a la segunda, por ver qué marca hago en una prueba de cinco kilómetros, y por saber a cuánto me quedaría de la mínima en mi categoría. Ya sé que las marcas que realmente valen son las de la pista, pues es lo único que está medido correctamente, pero, por lo menos, puedo tener una pequeña referencia.
Acerca de los entrenamientos, hoy comencé la semana haciendo unas series... cortas. Bueno, de medio fondo. Hoy tocó calentar 20 minutos para luego ponerse manos a la obra con siete series de 800 y una de 400, recuperando entre cada ellas minuto y medio, para acabar con cinco minutos de rodaje muy suaves. Así, completé un total de poco más de 11.70 kilómetros en 45'19", a 3.52 min/km. Hoy la verdad es que, aunque ha tocado sufrir, me lo he pasado bien. Hacía mucho, mejor dicho muchísimo tiempo que no hacía series de 800 (creo que desde la temporada que competí en Aranda, Cantimpalos y Venta de Baños, es decir, temporada 2012-2013), y ya tenía ganas de hacer series sobre esa distancia. Por lo demás, esta semana se presenta interesante, la verdad. La estuve programando para hacer lunes y miércoles fuertes, y el resto de la semana hacer rodaje cómodo. Tras las series de hoy, están programados mañana 10 kilómetros a 4.30, el miércoles series largas, el jueves otros 10 a 4.30, el sábado la competición, y el domingo, según estén las piernas, rodar algo cómodo o empezar a dar pedales.
Nos vemos... haciendo deporte, claro.
1 comentario:
Alejandro, no te obsesiones. Eres muy joven, no puedes estar pensando en qué pasará cuando te lesiones, si lo tendrás que dejar, qué harás entonces... Disfruta de esto. Eres muy rápido, puedes ser un gran corredor popular. Y muchos de esos sueños están en tu mano. ¿Correr la San Silvestre Internacional? Pero si piden 38 minutos y tú tienes una marca mucho mejor, la podrías correr cuando quisieras. Un saludo desde Madrid.
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