jueves, 2 de mayo de 2013

Prueba II: Garmin Forerunner 110


Hace algunos meses escribí una prueba sobre el Garmin Forerunner 110 que suelo usar para entrenar en atletismo, ir a las competiciones de carrera a pie y en las salidas con la bici. Mi intención ahora es volver a hablar de este GPS, aclarando algunos detalles respecto a la anterior crónica, añadir algunas cosas y, cómo no, aconsejaros su uso.

Una de las cosas que he descubierto en este tiempo es que ya sé cómo poner la velocidad a la que vamos en vez del ritmo por kilómetro en la pantalla. Qué queréis que os diga, no me había parado a leer las instrucciones y tampoco se me había pasado por la cabeza que esta opción podía estar donde la encontré, aunque era de lógica. Tras toquetear varias veces los botones y andar mirando varias funciones del Garmin, me dio por darle donde pone “Configuración”. Ahí me salieron varias pantallas para ir modificando lo que ya estaba programado en el GPS. Una de esas ventanas tenía que ver con el ritmo y la velocidad. Resulta que si le daos a la flechita, podemos poner una, y si le damos otra vez, ponemos la otra. Una de las cosas que me llamó la atención cuando probé la velocidad en una salida con la bici fue que, cuando lo configuré así, todas las ruta que tenía guardadas en el Garmin con el ritmo por kilómetro se pasaron de forma automática a estar en velocidad media. Un dato curioso. Eso sí, del resto no modificó nada. Con la configuración podemos modificar varias historias más además de esto, como los pitidos o la hora.

También he descubierto (incluso he hecho la prueba para ver cómo funcionaba), que se puede programar para quitar la opción del pulsómetro y que solo nos marce el tiempo, el ritmo por kilómetro o velocidad, las pulsaciones y los kilómetros. Esto se consigue también dándole al botón rojo y buscando. Personalmente al tener de referencia el ritmo por kilómetro, me pude guiar, pero, teniendo la opción el pulsómetro, os recomiendo que no lo quitéis, es mucho mejor tener dos referencias (ritmo/velocidad y pulsaciones) que una sola. Así podemos dosificar más y mejor el esfuerzo que hagamos durante el entrenamiento que tengamos previsto hacer.

Respecto al cronómetro por vueltas ya me voy manejando con él, porque, al principio, me armaba bastantes jaleos por el tema de las distancias. Esto lo descubrí en la II Carrera Popular de Chema Martínez en Villalpando. Resulta que nosotros le damos al botón de las vueltas y nos pita por cada kilómetro, pero no cada kilómetro exacto, sino cada kilómetro que ha pasado dentro de esa vuelta. Es decir, estamos haciendo un circuito de cuestas y queremos saber el tiempo por vuelta para ver luego los datos (tiempo, distancia y ritmo/velocidad). En la competición de Villalpando cambié de vuelta cuando entramos en la Plaza Mayor del puelo. Entonces llevábamos algo más de 2,5 kilómetros. A partir de entonces, no pitaba en los kilómetros exactos, como habitualmente había estado haciendo, sino cuando pasaba un kilómetro desde la distancia en la que yo había cambiado de vuelta.

Respecto al resto de cosas, sigo estando igual de contento que cuando publiqué la primera prueba. Sigue disgustándome el tema de la batería, que si no lo cargo me viene a durar sobre una semana, y la correa, que temo que se rompa, pues no tiene repuesto y habría que cambiar el GPS entero. Lo del Garmin Connect es una aunténtica delicia. Es muy completo, dando mucha información sobre el entrenamiento: gráfica de pulsaciones, desnivel y ritmo, los pasos por cada distancia marcada (aunque viene de fábrica que pite y nos coja el tiempo en cada kilómetro, esto puede cambiarse manualmente y poner la distancia que nosotros queramos, bien por encima o bien por debajo del kilómetro)… Además, si cogemos el tiempo por vuelta, nos da también ese tipo de información. Personalmente, aparte de poner los entrenamientos en este programa y en Endomondo, suelo colgar algunas rutas en Wikiloc. Ahí podemos ver cuántas referencias ha cogido el GPS. Si corriendo ya coge unas cuantas (depende de la distancia, las 700 o incluso las 800 las coge bastantes veces), en bicicleta coge muchísimas (en algunas ocasiones está cerca de las 2000),lo que hace que sea interesante ver las rutas tanto atléticas como ciclistas, sobre todo si son por caminos.

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