Van pasando los días y los
meses. Como quien no quiere la cosa, ya estamos metido en el mes de
mayo, y con él, la llegada del buen tiempo empieza a hacer acto de
presencia. Muchos estaréis aprovechando para acabar de afinar de
cara a las pruebas de pista, mientras que otros os decantaréis por
ir a competir al mogollón de carreras populares que nos encontramos
cada fin de semana en las diferentes provincias del país. Yo soy de
ese último grupo de atletas, lo soy ahora y lo era antes, cuando
entrenaba a las órdenes de un entrenador, pues hasta la temporada en
la que dejé de entrenar en serio, nunca habíamos pensado en ir a
correr en el óvalo de los 400 metros. ¿Error o acierto? Supongo que
tiene de las dos partes, aunque, a la hora de llevar una escala
lógica, lo suyo hubiera sido meternos a competir en la pista y
olvidarnos un poco de todas esas pruebas populares en las que
participé. Pero bueno, tampoco me arrepiento de lo que hice, porque,
aunque quizá no seguí esa escala lógica, logré hacer unos papeles
creo que buenos en esas populares en las que participé.
Carles Castillejo. |
Pero, aparte de los atletas
que comentaba antes, muchos, o más bien unos privilegiados, estarán
preparando los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Vale, lo
reconozco, solo he seguido un poco más, aunque solo por encima, la
prueba masculina de maratón. Es la única prueba que me ha llamado
más la atención, quizá porque, en parte, ha sido la más
mencionada en los medios de comunicación, pues cada vez que entraba
en un medio en busca de noticias de atletismo, siempre había alguna
vinculada a las mínimas de los atletas para los 42 kilómetros, o
porque, quizá, es de las pocas pruebas que me llama la atención,
incluso por encima de la carrera de ciclismo. El hecho es que he
procurado estar atento a qué atletas españoles iban en busca de
esos 2h13', logrando así la mínima exigida para, por lo menos,
poder optar a ir a Río. De todos los intentos que ha habido, el que
más llamaba la atención era el de Sevilla. Una de las mejores
maratones de nuestro país, Campeonato de España de maratón y, en
categoría masculina (vuelvo a decir que, de todas las pruebas, solo
he seguido la maratón masculina), se juntan Carles Castillejo como
veterano en la distancia, junto al debutante, que en esta ocasión
era Jesús España, gran atleta de 3000 y 5000, pero que, quizá, ese
día arriesgó demasiado, buscando una grandísima marca en una
distancia mucho más larga a las que él estaba acostumbrado a
destacar. La emoción estaba servida y nos tocaba esperar 42195
metros para ver qué iba a suceder. Finalmente, vemos que Carles se
proclama campeón de España de la distancia y que Jesús es segundo,
y ambos con un tiempo por debajo de las 2h13'.
Javi Guerra. |
Aparte de Carles Castillejo y
Jesús España, nos encontramos con Javi Guerra. Campeón de España
de maratón en 2013, es el tercer integrante del trío que irá a
competir a Río de Janeiro sobre los 42 kilómetros. La verdad, creo
que es un atleta que puede dar bastante guerra en la distancia. Si os
soy sincero, para mi, Javi y Carles son, del trío, los dos con más
posibilidades de hacer un buen papel. Ojo, no digo que Jesús España
no tenga papeletas para hacer una buena maratón en los Juegos
Olímpicos, ojalá podamos ver una gran actuación de España, Guerra
y Castillejo, pero me da la impresión de que, a priori, son los
atletas con más posibilidades. Hay una cosa clara, y es que, en este
tipo de pruebas, tanto Guerra como Castillejo tienen más experiencia
que él, aunque solo sea porque han corrido unas cuantas maratones
más, lo que, en un principio, les da más posibilidades de saber
cómo van a responder a esos 42195 metros; sin embargo, como suele
decirse, será la carretera quien ponga a cada uno en su sitio, y lo
mismo suecede como en Sevilla, donde Jesús España logró la mínima,
por lo que me tuve que tragar mis palabras, pues comenté que, a mi
entender, no tenía demasiadas opciones de lograr bajar de esos
2h13'. Y, para acabar, está Iván Fernández. Aunque logró bajar de
esas 2h13', será el atleta español que irá de reserva.
Iván Fernández. |
Cambiando un poco de tercio,
volvamos a los que corremos a ritmos de persona “normal”, a los
que somos atletas populares, o “runners”, ésa denominación tan
de moda, y que yo, maniático que es uno, tanto odio. Como decía,
estamos ya en el mes de mayo, y nos encontramos con un montón de
carreras populares en nuestro calendario. La verdad, no deja de ser
llamativa la gran oferta de carreras populares que nos encontramos,
lo que me hace pensar que si no nos estamos pasando un poco con esta
fiebre del “running”. Aquí sí creo que podemos utilizar esta
denominación inglesa. El motivo por el que, muy a pesar, creo que
aquí sí puedo utilizar, es muy sencillo. Para ello, hay que
distinguir entre atletas y runnes. Los atletas son esas personas, que
pueden o no llevar mucho tiempo corriendo, pero que, lo primero, son
personas muy competitivas, que se entrenan fundamentalmente para
competir, y luego, son gente que suelen entrenar de una forma más o
menos organizada, con entrenador la mayoría de ellos (y los que no
lo hacen, se lo pueden permitir porque su experiencia se lo permite),
y, un punto muy importante, saben hasta dónde pueden llegar y han
ido aumentando de distancias siguiendo una escala más o menos
lógica. El “runner” suele ser un poco la antítesis, aunque no
siempre. Suelen ser corredores que llevan poco tiempo corriendo, se
han enganchado a esto por diversas circunstancias extradeportivas y,
en muchísimos casos (demasiados), con muy poca paciencia, lo que les
lleva a que, sin haber llevado una escala lógica y sin llevar apenas
tiempo corriendo, se animen a competir en pruebas de media maratón e
incluso maratón, y, normalmente, suelen ser personas a las que le
gusta tomarse lo de los dorsales con más calma. Están un poco a
medio camino entre el atleta popular y el atleta federado.
Jesús España, en la llegada de la última Maratón de Sevilla. |
De entre todas estas pruebas
que nos encontramos en el calendario, yo, como supongo que ya haréis
muchos, he optado por elegir solo las que, por unas circunstancias u
otras, más me llaman la atención. Aunque, las cosas como son, con
tantas competiciones, es muy complicado decantarse por una en
concreto. Yo ya tengo ás o menos decidido mi calendario hasta
finales de temporada. No me he esmerado demasiado pensando, la
verdad. Este domingo, tras haber corrido el pasado en Sardón de los
Frailes, y si no surge nada, tocará desplazarse hasta Becerril de
Campos, al 10.000 que lleva el nombre del gran fondista español
Mariano Haro. Mi idea allí será sencilla, y no es otra que salir a
estar lo mejor posicionado en la clasificación. No he corrido
demasiadas carreras por la provincia de Palencia (dos años Venta de
Baños), y en mi categoría, por lo que a
nivel absoluto, no tengo prácticamente ninguna referencia sobre qué
rueda seguir, así que me tocará ir valorando en carrera. La próxima
parada, en un principio, estará en Villalpando, en la carrera
popular que lleva el nombre de otro gran fondista español, Chema
Martínez, con raíces en esta localidad zamorana. Es una carrera en
la que me quiero quitar la espina tras las malas sensaciones que tuve
en la edición del año pasado. A ver qué sucede este año. Y
siguiendo, la que en un principio será mi última competición, los
13.5 de Benegiles. A ésta, creo haberlo comentado ya, me da cierto
respeto salir a tope, así que mi primera idea es salir a hacer un
rodaje alegre, con idea de tocar ritmos de 3'45-3'50, aunque, picón
que es uno, tampoco me atrevo a decirlo muy alto…
Resumen del entreno de hoy. |
En lo que se refiere a los
entrenamientos, poco tengo que decir. Sigo con la misma estructura de
las últimas semanas, con sensaciones muy parecidas. Tras el rodaje
del lunes, del que ya os hablé en la última entrada, el martes me
animé a hacer un rodaje semejante, en esta ocasión por el carril
bici y el Puente de los Poetas, completando un total de 14.4
kilómetros en 1h00'55”, a 4.16 min/km y 166 pulsaciones medias, un
poco alto de pulso, teniendo en cuenta que procuro no pasar de las
165 medias. El miércoles tenía en mente rodar algo un pelín más
largo, pero a un ritmo cómodo. Sin embargo, y siguiendo con lo que
comentaba en el párrafo anterior, soy un poquito picón, y como vea
que tengo buenas sensaciones, fuerzo más de lo debido… Mi idea era
rodar sobre los 4'25-4'30, pero lo que empezó siendo un rodaje
regular, acabó siendo un rodaje con muy buenas sensaciones,
completando 16.6 kilómetros en 1h10'56, a 4.15 min/km y 162
pulsaciones medias, por lo menos entro muy bien en el margen de
pulsaciones al que me gusta rodar. Para seguir, hoy tenía previsto
rodar una hora al mismo ritmo al que tenía que haber rodado ayer…
Otro objetivo incumplido. El hecho es que arranqué por la zona del
carril bici para ir entrando en calor, y más o menos iba logrando
controlarme, pero completados los primeros 20 minutos,
automáticamente empecé a incrementar el ritmo poco a poco… Al
final, otros 14.2 kilómetros en 1h01'15, a 4.18 min/km y 161
pulsaciones medias, y, si del rodaje de ayer comentaba que entraba
dentro del margen de pulsaciones, hoy no me hubiera importado rodar
un poquitín más bajo, sobre las 155-157 medias… Para mañana está
previsto el día de descanso deportivo, mientras que el sábado
tocará hacer un rodaje cómodo (a ver si teniendo carrera el
domingo, consigo controlarme un poco más), y el domingo, a competir
en Becerril sobre 10.000 metros.
Nos vemos… haciendo deporte,
claro.
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