I Carrera Popular de Sardón de los Frailes

Esta mañana se ha celebrado en Sardón de los Frailes la primera edición de la carrera popular que lleva el nombre de esta localidad charra tan vinculada al embalse de Almendra, una prueba que ha estado muy bien organizada, y promete tener un gran futuro si no cambian su mentalidad de organizar una carrera popular. Yo, desde luego, intentaré tener la fecha de esta competición reservada para poder volver a ponerme un dorsal en Sardón de los Frailes. 

Cartel de la I Carrera Popular de Sardón
de los Frailes.

Tenía bastantes ganas de competir en esta prueba, la verdad. Me encanta poder correr por esta zona de Salamanca, a la que me siento, por diversos motivos, bastante ligado. He transitado mucho este pueblo con la bici, una ruta que me encantaba hacer y que durante un verano prácticamente hice todos los días. La última vez que pasé por aquí por algún tema vinculado al deporte fue en el veranod e 2012; desde entonces, no había vuelto a Sardón, así que hoy era una gran oportunidad para vestirme de corredor, colgarme un dorsal, y hacer lo que más me gusta en una zona muy vinculada a mi vida deportiva. De Zamora a Sardón teníamos un viaje de más o menos hora y cuarto, el cual emplee para ir recordando algunas anécdotas en bici por las carreteras que nos llevaban hasta Sardón, y, por otro, para ir pensando en mis opciones y objetivos dentro de la carrera. La verdad es que no tenía demasiadas esperanzas de poder hacer un buen papel, aunque las sensaciones últimamente estaban siendo bastante buenas, lo que me daba un punto de esperanza para dejarme ver. Tenía como objetivo poder correr a un ritmo de 3'30, pero ésa esperanza me desapareció con cierta rapidez, al ver el recorrido en la web de la prueba, lo que me "limitaba" (ya es bastante) a intentar hacer un buen papel, por tierra en su mayoría, y con algún repecho que me hizo estrujarme pero bien para poder llegar a la cima.

Llegamos a Sardón bien de tiempo para recoger el dorsal sin prisa. El hecho fue que la recogida estaba programada a partir de las diez de la mañana, pero se retrasó unos veinte minutos. Aun así, nos los dieron con tiempo suficiente como para poder cambiarnos y ponernos calentar. Mientras esperábamos, llegaron algunos "viejos" conocidos, como Jorge (llegamos a la par con los coches), Alex y Mendo. A Mendo le veía como una buena referencia en carrera, porque seguir a Jorge y Alex era misión imposible, son muy superiores. Y con el paso del tiempo, llegó el momento de ponerse a rodar a ritmo muy suave y hacer algún que otro ejercicio para ir entrando en calor en una mañana que se presentaba bastante fresca, aunque, ya metidos en carrera, me hizo poco para estallar a sudar. Poco a poco, las calles de Sardón fueron llenándose de corredores dispuestos a pasar una buena mañana de atletismo por las calles de este bonito pueblo, lo que, en mi caso, no hacía más que ir aumentando los nervios típicos previos a una competición.

Sardón de los Frailes. (Foto: www.desardon.es)

La salida, con muy una puntualidad que ya podían copiar algunas pruebas, me gustó bastante. No creo que fuera una salida demasiado rápida, pero la verdad es que no me noté nada mal durante unos primeros que siempre se me han dado bastante mal, y que en más de una ocasión me han jugado alguna mala pasada. En el primer kilómetro quedó claro que los dos puestos irían destinados para Alex y Jorge, la historia sería saber el puesto, el cual no tenía demasiado claro, aunque más o menos me hacía una idea del orden de llegada. De salida se hizo un grupo con los que a la postre seríamos los primeros cinco clasificados. Llevando ya a dos corredores por delante, y sabedor de que no iba a ser capaz de aguantarles, decidí quedarme por detrás e intentar asegurar el tercer puesto, lo que me resultó bastante complicado. Mendo se quedó algo rezagado al paso por el primer kilómetro, así que mi lucha iba más enfocada a que el otro atleta, que no conocía, no me ganara, aunque sin descuidarme tampoco del atleta del Vino de Toro y organizador de los 10 kilómetros de Fuentesaúco. Durante la primera vuelta (5000 metros), iba en busca de descolgar a mi perseguidor. Al primer paso por meta intenté subir algo el ritmo, pero me di cuenta de que llevaba cierta ventaja y que derrochar tanta energía teniendo aun por delante otros cinco kilómetros y unos cuantos repechos, era algo sin demasiada lógica, y que, además, ya empezaba a acusar algo el esfuerzo de la primera vuelta, por lo que iba a tener que saber controlar bien para evitar perder el tercer puesto. Más o menos, fui capaz de mantener el ritmo. Al final, aunque sufriendo más de lo deseado en la última vuelta, fui capaz de llegar a meta en el tercer puesto de la categoría Absoluta, lo que me llevó a ser también tercer Senior, por detrás de Alex y Jorge, primero y segundo, respectivamente. Los datos del GPS fueron: 9960 metros en 35'40, a 3'35 min/km y 191 pulsaciones medias. 

La verdad es que creo que podemos decir que los participantes hemos podido disfrutar de una bonita mañana de atletismo. La organización creo que ha sido impecable para haber sido la primera vez que organizaban la carrera. Me parece que el trato hacia el corredor ha sido impecable, y que han conseguido que el buen ambiente haya sido el reinante durante toda la mañana. El recorrido creo que estaba muy bien delimitado. La verdad es que, en un principio, no me acababa de convencer que fueran un par de vueltas de cinco kilómetros, aunque debo reconocer que, a la postre, me ha gustado este formato. Sobre la comida, una paella, debo reconocer que me encantó, para mi gusto, muy bien cocinada y con un muy buen sabor. ¿Puntos negativos? Destacaría dos. Por un lado, el tema de la recogida de dorsales. Estaba establecido que se darían a partir de las diez de la mañana y, como comentaba al principio del artículo, tardaron unos veinte-veinticinco minutos en empezar a darlos. El segundo, fue la tardanza de la entrega de trofeos. Desconozco los motivos que llevaron a la organización a tardar cierto tiempo en ambos puntos, pero supongo que los sabrán arreglar y para futuras ediciones (estoy seguro de que habrá más), lo habrán corregido. Esto me gustaría que se tomara como una crítica constructiva, y me gustaría también dejar claro que, bajo mi punto de vista, no dejan de ser un par de errores sin más importancia si tenemos en cuenta que era la primera vez que organizaban una carrera, y que si en muchas carreras tras varias y varias ediciones siempre hay fallos, en la primera, es de esperar que puedan ocurrir estas cosas. Pero que quede claro que, pese a esto, la organización ha estado impecable, mi nota es la máxima posible, les doy un sobresaliente muy merecido. Esperemos que para el próximo año podamos volver a vernos por Sardón de los Frailes y podamos repetir una actuación semejante a la de hoy.

Media Maratón "Ciudad de Zamora".

Para cerrar el artículo, me gustaría comentar la anécdota de la mañana. Aparte de mis padres y mi hermano, vino a verme correr mi primero pequeño junto a mis tíos. Al llegar a meta, mi primo me estuvo haciendo compañía mientras caminaba un poco para bajar algo el pulso mientras esperaba a mi amigo Alex para soltar. Suelo guardar todos mis dorsales, pero, en esta ocasión, decidí que el dorsal se lo quedaría mi primo. No deja de ser un acto simbólico, pero me hacía ilusión compartir algo con él, después de ver cómo me miraba con mezcla de asombro y susto nada más llegar a meta, con una cara que debía de demostrar que los últimos cinco kilómetros se me habían hecho un tanto largos y con el corazón a casi 200 pulsaciones. Pero la cosa no quedó ahí. Cuando subí al podio como tercer absoluto, me lo llevé conmigo y, cuando me dieron el trofeo, se lo di a él para que lo luciera, algo que seguro se le da mejor que a mi, que soy un ganso en los podios. Al bajar, le dije que se quedara también con el trofeo. La verdad, me miró con una cara que creo demostraba ilusión y se fue rápido buscando a mi tía. "Mira, mira lo que tengo". "Pero bueno, devuélveselo a tu primo, que es de él". Le dije que se lo había regalado yo, me hacía mucha ilusión, viendo cómo me había estado mirando cuando llegué a meta y cómo me preguntó si estaba bien cuando me vio llegar bastante castigado. Luego, me consta que no se ha querido separar de él en toda la tarde.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.