Hoy me apetece hablar sobre ciclismo, y en concreto sobre un tema que en alguna ocasión hemos visto que sucede en el pelotón, y que puede interpretarse de varias formas. Me estoy refiriendo al "parón" que hace el pelotón tras una caída. Podría darse la circunstancia de que desde el pelotón se hablase de un parón, pero no vinculado a una caída, sino a otros temas, algo de lo que voy a tocar más abajo. Pero, ante todo, me gustaría expresar mi opinión acerca de esto, que en muchos casos puede perjudicar más que ayudar.
Recuerdo que hace unos pocos años, tampoco muchos, el abulense Carlos Sastre, mientras se estaba disputando el Tour de Francia, estuvo comentando en los periódicos el tema de los parones con una frase que podríamos decir marcó historia. He estado buscando aquella noticia para poder poner exactamente el comentario que causó tanta polémica al no interpretarse correctamente. La frase en concreto era ésta: "Creo que estamos haciendo del ciclismo una patraña de niñatos y esto es lo que sucede en este tipo de circunstancias". No quiero dar más morbo de lo que en su día se dio a lo que dijo Carlos, pero sí que es cierto que ésta frase quiero que esté aquí presente porque podría darse el caso de que, de seguir haciéndose dichos parones, el ciclismo pase de estar convirtiéndose a ser una patraña de niñatos como comentaba el abulense.
Ante todo, debemos ser conscientes de dónde nos encontramos. De acuerdo, Sastre dijo ésa frase en la que todo el mundo cataloga como la carrera más importante por vueltas, el Tour. Pero a mi, personalmente, me da igual en qué carrera nos encontremos. Podemos estar en el Tour que, como dije, es considera la prueba por etapas de más prestigio, pero también podemos estar en otras muchas pruebas de importancia, como clásicas (París-Roubaix, Tour de Flandes, Milán-San Remo...), pruebas por etapas (París-Niza, Dauphiné-Liberé...), o nos podemos encontrar en pruebas que se encuentran catalogadas de "menos importancia" (lo pongo entre comillas porque éso es un tema muy relativo), pero, ante todo, estamos compitiendo, nos encontramos disputando una carrera, y cada uno de sus participantes, o mejor dicho en el caso del ciclismo, cada equipo va buscando unos intereses propios, marcados por quién sea, pero no todos los ciclistas tienen los mismos objetivos dentro de esa carrera. Pero, repito, ante todo, se va compitiendo. Con esa base, si un ciclista se va al suelo, ¿qué debemos hacer, paramos al pelotón para que lo coja o cada uno sigue a lo suyo y que el resto se apañe como pueda?
Muchas veces tenemos al ciclismo como un deporte individual, pero realmente el equipo tiene mucha importancia, demostrando muchas veces la importancia de la solidaridad y el respeto con el compañero. Siendo así, podemos pensar: "claro, si queremos ser buenos compañeros, deberíamos para todos a esperar". Pero vamos a ver, ¿nos hemos parado a pensar dónde estamos? ¡Que estamos trabajando! Porque, claro, hay que tener en cuenta que los ciclistas que salen por televisión son profesionales. A mi me parece perfecto que desde el equipo, el director ordene parar a unos cuantos ciclistas para poder ayudar al caído, dejando a unos gregarios con el líder, puesto que éste no debe quedarse solo en ningún momento y en ninguna situación, y mandar frenar a otros gregarios para que colaboren con el que ha quedado atrás. Lo que no veo lógico es que el pelotón se ponga a dialogar para frenar a casi 200 por uno. ¿Vosotros cómo lo veis? Se está compitiendo, no estamos entrenando, y debemos hacerlo con todo, tanto lo bueno como lo malo.
El ciclismo, por desgracia, tiene un factor que condiciona en gran medida los resultados, y precisamente son esas caídas. Los profesionales tienen un manejo de la bicicleta envidiable, muchos han ido, durante años, a escuelas de ciclismo, y han estado durante otros tantos años controlados por monitores y, ante todo, han rodado pero mucho en pelotón. Si juntamos la técnica obtenida durante años a través de los monitores con todos los kilómetros hechos en grupos, nos salen ciclistas que no se mueven cuando pedalean, que da gusto ir con ellos por la sensación de seguridad que te dan (doy fe de ello, me ha pasado en más de una ocasión, no con profesionales, pero sí con ciclistas que han estado muchos años compitiendo en bici). Está claro que un profesional tiene todo muy desarrollado, pero se da el caso de que esa sensación de nervios en los pelotones cuando hay algo en juego, sea una victoria de etapa o una gran vuelta, o ante algo importante en el terreno (adoquines, puertos...), que, junto a las grandes velocidades de los profesionales, provoca que una caída, por mucha habilidad que uno tenga, no sé si catalogarlo de "normal", pero sí de muy probable. Por lo tanto, si cuando uno sale a darse una vuelta en bici, con el simple objetivo de disfrutar, debe asumir que tiene muchas posibilidades de irse al suelo, cuando nos metemos en un grupo éso se multiplica. Básicamente, y corrigiendo un poco lo que escribí antes, una caída en ciclismo casi puede catalogarse de habitual. Por lo tanto, sigo sin ver normal el hecho de que tengan que pararse 200 ciclistas porque uno se ha ido al suelo. Con que pare un número concreto de compañeros de su mismo equipo vale.
Y, por supuesto, en estas situaciones puede darse el caso de que, aunque el pelotón decida frenar, haya una escapada por delante y, aunque se le comunique, no quiera colaborar, o que algún ciclista decida seguir a su bola por eso mismo. Personalmente, lo veo lógico. Van haciendo su carrera, defendiendo unos intereses concretos, y si el caído no es del equipo al que pertenece, ¿por qué no seguir haciendo mi trabajo? Creo que no es un pensamiento egoísta, es ir pensando que a mi me pagan por hacer mi trabajo, no por colaborar para que un ciclista de otro equipo se meta en el pelotón, porque es que estoy colaborando no solo para ello, sino, además, estoy beneficiando a otro equipo, pudiendo salir el mío incluso perjudicado.
Pero, aunque estoy criticando los parones por caída o avería, sí que estoy de acuerdo con parones en alguna situación concreta dentro de las carreras, pero aquí está el problema de que en muchas situaciones no hay unión suficiente por parte de los ciclistas. Estamos hablando ante recorridos de excesiva dureza o algunos que podríamos catalogar un poco de "incoherentes", o cosas por el estilo. Sí soy partidario de parar en estos momentos porque estamos hablando de algo que afecta a un pelotón de 200 ciclistas, no a uno solo o a un pequeño grupo de entre 200 que están en carrera. Situaciones, además, que han provocado en más de una ocasión que el ciclismo y los ciclistas acaben manchados, y no me refiero a temas higiénicos, precisamente. Me refiero a unirse para luchar, por ejemplo, contra el dopaje, algo que realmente ha dañado al ciclismo y a muchos ciclistas, y que ha provocado retiradas prematuras por parte de muchos que podían haber dado mucha guerra en su etapa profesional. También podemos hablar de situaciones de extrema dureza en los recorridos, con rampas donde los ciclistas deben bajarse de la bicicleta para subir, como ha ocurrido alguna que otra vez, o recorridos como aquellos famosos del Giro de hace no tantos años, por el famoso "sterrato". Pongo solo estos ejemplos, pero seguro que si buscamos hay muchos más. Pero, como sucede muchas veces, no hay la unión suficiente para defender a nuestro deporte y defendernos entre nosotros. Y ahora no estamos hablando de intereses individuales, estamos hablando de defender intereses generales, que afectan a todos, para luego poder defender intereses individuales.
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