¿Valoramos lo suficiente a los deportistas?

No sé si lo que yo quiero expresar en este artículo se adapta bien al título de la entrada, pero el hecho es que sí que tiene, y mucho, que ver con el tema que esta vez quiero tratar.
El hecho es plantear la siguiente pregunta: ¿valoramos lo suficiente a nuestros deportstas de élite de algunos deportes? Evidentemente, me centraré en el ciclismo y el atletismo. Tanto corredores (sobre todo de fondo, no hay más que mirar la repercusión de Bolt con la de alguien de fondo) y los ciclistas son los deportistas que, desde mi punto de vista, están menos valorados. ¿La razón? No lo tengo nada claro, desconozco si es el doping, que es lo que suele crear la mala imagen, si hay deportes como el fútbol que tienen mayor repercusión y hacen que muchos se inclinen por esos deportes antes que por otros, pero el hecho es que se valora más a aquellos deporitstas que tienen mucha repercusión que a los que no la tienen, y éso creo que no se puede permitir.


Antón en su época de corredor tuvo que hacer muchísimos entrenamientos
agónicos para llegar a ganar todo lo que ganó a lo largo de su carrera
como atleta profesional hace ya unos cuantos años. ¿Se le valoó lo suficiente?

Tanto los atletas como los ciclistas son personas que se han formado durante muchísimos años a base de sacrificio, esfuerzo, ilusión... y no se les reconoce todo lo que han hecho y hacen en su época de profesionales. No solo el esfuerzo en las competiciones, éso es solo lo que la gente ve, pero llevan muchísimas horas de entrenamientos en sus espaldas, muchísimas kilómetros en sus piernas. Y aquí es donde yo quería llegar. La gente solo ve a los maratonianos volar sobre el asfalto, a los sprinters lanzarse en las rectas, a los escaladores subir el Angliru como los ángeles, pero, aparte del esfuerzo que están haciendo durante ese momento y que la mayoría de las veces no lo apreciamos, ¿somos conscientes de la de horas que han tenido que hacer para que nosotros disfrutemos de ellos? Cuando vemos al maratoniano correr, no nos damos cuenta de que se ha estado preparando durante muchos meses,haciendo días de incluso 35 kilómetros de carrera continua, unas series a ritmo agónico, sumando unos kilómetros totales a la semana que muchas personas serían incapaces de aguantar. Cuando vemos a un ciclista subir como los ángeles por un puerto de alta montaña, como puede ser, por ejemplo, el Angliru o el Tourmalet, no nos damos cuenta de que, antes de éso, ha estado entrenándose durante muchísimo tiempo, haciendo días de aunténtico y puro sufrimiento, haciendo unas subidas que pocos mortales serían capaces de aguantar, y menos al ritmo que un profesional lo haría. Y no solo éso, sino muchos días de fondo para poder aguantar las etapas de 200 kilómetros con muchos puertos, como pueden ser algunas típicas del Tour o las que hemos visto durante el Giro de Italia. Lo mismo pasa con los sprinters, deben trabajar haciendo mucho fondo para no descolgarse a la mínima posibilidad, pero deben trabajar mucho los sprints para poder ganar en su especialidad. ¿La gente ve estos esfuerzos? Y, lo que es más importante, ¿realmente los valora?
Otro asunto, y con esto acabo, es que nosotros tan solo vemos la victoria, y criticamos a aquel que creemos que ha hecho algo mal. Pero, ¿hemos probado nosotros a ponernos en su situación? Cuando un sprinter va lanzado junto a otros 10 sprinters, es muy complicado poder encontrar un hueco para poder pasar, teniendo en cuenta que a la mínima nos vamos al suelo. Cuando un atleta va sufriendo en el kilómetro 37 de la maratón, no puede pensar tanto como si no estuviera corriendo, el cuerpo ya no le da para más, solo piensa en llegar y es muy complicado pensar las tácticas tan razonadamente como si estuviera sentado en el sofá. Ésto tanto a ciclistas como atletas les sucede. Cuando se va compitiendo y luchando por algo importante, y más cuando son competiciones muy cortas, piensas lo que yo llamo "estrategias esporádicas", es decir, se te viene algo a la cabeza, en cuestión de segundos lo razonas un poco y decides si es bueno hacerlo o no. Claro, con ese espacio de tiempo tan corto, es muy complicado acertar.

Así que, ya para acabar, vamos a intentar valorar un poco más estos deportistas, que en España tenemos nos muy buenos y debemos valorarlos como tal.