miércoles, 8 de octubre de 2014

Pensar

Me animo a escribir estas líneas cuando llevo ya llevo tres días completados de la cuarta semana de entrenamientos. Voy a contaros un poco cómo me han salido estos entrenamientos, qué tengo pensado hacer para lo que queda de semana, y algún tema más.
Tras la sesión de 14,4 kilómetros el domingo, el lunes me volvía  calzar las zapatillas para, de nuevo, ir a entrenar acumular kilómetros por Valorio. Acabé con 13 justos en 53'14, a 4.06 el mil y 175 pulsaciones medias. Acabé contento por el ritmo al que rodé, aunque el pulso fue algo alto. Fui acompañado hasta el primer mil por el grupo que entrena Teo, y luego algo más de dos kilómetros, que me sirvieron para hacer la sesión más amena. Ayer plantee el entreno para rodar 50 minutos. Estuve pro la orilla del Duero, rodando prácticamente todos los kilómetros por tierra. Finalmente completé 12,40 kilómetros en 50 minutos justos, a 4.02 el mil. Cada día más cerca de los cuatro minutos. Ayer, sin embargo, las sensaciones no me convencieron en exceso. Y hoy, salió. La idea era hacer una salida algo más larga que la de estos días. Así, me fui a rodar por la orilla del Duero y el carril bici, una ruta que hacía bastante que no hacía entera por el tema del asfalto. La verdad es que me he notado cómodo en los kilómetros, aunque tuve una pequeña "crisis" a falta de unos tres/cuatro para acabar. Así, he completado 15 kilómetros justos en una hora y dos segundos, a 4.00 min/km según el GPS. De pulso, 174 medias. A ver si ya consigo mantener estos ritmos.
Ahora, toca seguir sumando kilómetros. Mañana, tras darle unas cuantas vueltas, tengo programado hacer 50 minutos de carrera continua. El viernes en un principio toca descanso. El sábado tocan otros 45/50' de rodaje suaves y el domingo la tirada larga de 70 minutos. Así, completo la cuarta semana de entrenos.
Luego, estoy pensando en hacer unos cuantos cambios de cara al segundo mes. Tenía planeado hacer ocho semanas solo rodaje, para meter ya a partir de ahí series, cambios y cuestas, pero quizá, con tanta sesión de rodaje, corra el riesgo de estancarme. No sería mala idea meter algunas sesiones de miles, algún fartlek o interval (qué palabrejas más raras...) y algún entrenamiento de cuestas, que me encantan. Solo tengo algún boceto en mente y tendría que mirar a ver cómo preparo exactamente esas cuatro próximas semanas ya con sesiones algo más rápidas. Creo que el cuerpo agradecerá meter algo más rápido para quitarse esa sensación de ir siempre rodando aunque debo reconocer que a mi es lo que más me gusta. Lo iré mirando a lo largo de la semana para tenerlo ya preparado el lunes. Cuando lo tenga preparado os comentaré cómo lo he organizado.
Cambio un poco. Decía Miguel Ríos en "A todo pulmón" una frase que me gusta bastante: "Defender mi ideología buena o mala, pero mía, tan humana como la contradicción". La verdad, creo que define lo que voy a tratar ahora. La verdad, ahora mismo me encuentro en una situación en la que realmente estoy disfrutando del atletismo. A lo largo del tiempo que he estado corriendo, he tenido momentos donde he disfrutado mucho, compartiendo kilómetros con muy buenos atletas pero con un lado humano muy interesante, mucho más que su palmarés como deportista, y he podido conocer a muchísimas personas en diversas competiciones, muchas de ellas futuras promesas del atletismo. Pero viendo eso desde la perspectiva del tiempo, y viendo cómo me encuentro ahora, no quiero saber nada de aquellos "viejos tiempos". He disfrutado, sí, pero si lo comparo con la sensación de disfrute que tengo ahora, no volvería a hacerlo. Es cierto que sigo machacando y que sigo entrenando a diario y que además este año intentaré en las (viendo cómo ando de estudios, pocas) carreras populares done vaya a participar. Pero si estoy disfrutando es, en primer lugar, porque mis entrenos me los planteo yo, nadie más. Vale, todos sabemos que la verdad es que no entiendo nada de esto y que hago ciertas burradas curiosilla, pero me veo con más libertad para hacer cada día lo que quiero. No digo que Teo me obligara a hacer algún entreno, simplemente que ya que era mi entrenador, intentaba cumplir con lo mandado lo mejor posible; ahora me pongo entrenamientos y los voy modificando según vayan las piernas. Otro factor importante para ese disfrute es que voy a las carreras sin un objetivo concreto, voy siendo consciente de que cuál es mi estado de forma y de hasta dónde puedo llegar. Un ejemplo claro es Bañóbarez. Llegaba en un estado de forma físico bueno, e intenté ir delante, o en Peñausende. Sin embargo, era consciente de que mi estado para correr en Villadepera no era el más apropiado, por lo que me dediqué a ir más atrás. Antes, me daba igual mi estado de forma, siempre quería ir delante.
Y no pienso cambiar mi mentalidad porque es en el deporte popular donde disfrute. Cada uno lo hacemos en pruebas diferentes, y yo lo hago aquí. He probado dos estilos y este me ha convencido. Tampoco quiero volver a tener a alguien que me guíe los entrenamientos, quiero ser yo mismo quien los programe. No tendré mucha idea, pero disfruto. Como decía Miguel, es mi ideología y puede o no ser acertada e incluso en algún momento puede contradecirse, pero es mía y de nadie más.
Ahora, toca seguir sumando kilómetros entrenando. También me gustaría colgarme el dorsal de una carrera junto a los Correcaminos y machacarme un poco. A ver para cuándo ese debut competitivo.
Nos vemos... haciendo deporte, claro.

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