XXXVIII San Silvestre Zamorana

-Distancia: 3500 metros

-Tiempo: 00:12:55.06

-Vel. media:

-Ritmo: 3:41 min/km

-Posición: 1º de 6 en Cadetes. Aún no sé cómo he quedado en la general de la Popular con los federados.

Hoy se ha celebrado la San Silvestre de Zamora, con una participación que ni la propia organización se esparaba: un total aproximado de 700 atletas. Ha sido una carrera llena de sufrimiento por una caída, de la que ya os hablaré más abajo.
Como este año los dorsales se darían por la mañana, a las 12:00 fuimos a la Plaza Mayor de Zamora a buscar los dorsales. Tras estar ayudando un poco a Teo (mi entrenador), entramos en el Ayuntamiento. Pero, había un problema, y es que, por razones que desconocemos, aún no hjabían podido dar los dorsales. Lo que hicimos fue volver con Teo y ver si el "apaño" le funcionaba. Teníamos pensado medir el recorrido, pero me dio por entrar al Ayuntamiento para asegurarme que los Cadetes ciorríamos a las 18:30, y vi que ya daban los dorsales, así que dejamos lo del recorrido para más tarde. Tras una larga espera, recogimos nuestros correspondientes dorsales y nos fuimos a medir el recorrido. Y, así, hasta las 17:00 horas no volví a saber nada de la San Silvestre (lo cual no quiere decir que no pensara en ella, cuanto más cerca estaba la hora, más nervioso estaba).
A eso de las 17:05 ya estábamos de nuevo en la Plaza Mayor. Los primeros ya habían tomado la salida. Tras hablar con algunos conocidos, nos fuimos con Luis, compañero de bici. Cabe destacar los buenos puestos de muchos corredores del Atletismo Zamora-Repostar. Juan David Manzano y Andrea ganaron y también algún segundo puesto en estas categorías que se pueden lamar "menores", pero que van casi tan rápido como cualquier otro atleta mayor. A eso de las 17:45 me fuí a calentar. Nada interesante en el calentamiento, salvo que vi a Rosa Valdeón, alcaldesa de Zamora, por la Plaza Mayor en dirección al podio. Llegaron mi madre y mi hermano, que vinieron, como podéis ver, más tarde que mi padre y yo. Les dimos la ropa y seguimos calentnado., Estuve on mi amigo Sera, que ganó en su categoría. Como anécdota, os puedo contar que, mientras hablaba con Sera, llamaron a los Cadetes. Fuimos para allí y hablé con un juez. "¿Pero no corremos con los Populares?" "Sí, pero espera que me asegure". Fue a hablar con otro juez y nos dijo que corrímos a las 18:30 con los Populares, así que nos fuimos. Al momento, nos volvieron a llamar. Volvimos. Hablé con Peña, un juez, y me dijo que no, que era las 18:30. Como ya tenímos el hueco para 15 minutos después, Steven y yo nos quedamos. Pero, como faltaba rato, acabamos haciendo un poco del recorrido para calentar. Pasó el rato y nos empezamos a colocar según iba diciendo la organización. Una vez que todo estuvo en su punto, se dio la salida. ¡Menudo mogollón de gente! Tras muchos empujones, consigo pegarme a un atleta. Pero, coincidió que pasó Marcos, así que me fuí tras él. Pero tuve la mala suerte de que, cuando pasamos por el arco que había en el recorrido, un corredor me pasó y, no sé muy bien qué pasó, que me fuí al suelo, dando un tortazo memorable. "¡Co... pero ¿no ves por dónde vas?!" le dije dando una voz. En ese momento no pensé lo que decía, solo en que ya no iba a poder ir todo lo bien que iba hasta entonces. Él tuvo el detalle de darse la vuelta y ayudarme. Más tarde, me pasó y me animó. Este tema de la caída, lo retomaré más abajo, porque no acaba aquí el asunto.
Seguí con la carrera, con un dolor en la parte lateral de la rodilla que no podía con él. Tuve que hacer muchísimo tramo haciendo fuerza con solo una pierna, porque con la otra, con el dolor, apenas podía apoyarla en el suelo. Me fastidió caerme, porque había un Cadete que me la s estaba haciendo pasar para poder ganarle. Me pasó, pero, con un poco de cabeza, le gané. En el primer paso por meta, pasé cogenado. Naide me lo notó. Seguí y el dolor se me fue un poco a la parte de atrás de la pierna, justo donde se dobla, que me permitió ir algo mejor. Subí algo el ritmo, lo que el dolor dejaba, y, cuando entré en la recta más larga, que iba desde el arco donde me caí hasta la Plaza Mayor, intenté hacerlo a lo que la pierna diese. La verdad es que acabé bien, gané a otro aalteta que venía por detrás, aparte de legar primero de mi cateogría. Pensé en levantar los brazos, pero paré, busqué a mi madre, le comenté lo que había psado y enseguida nos uimos a donde Protecciónm Civil. Allí me curaron y, mientras, mi padre fue a por mi padre, que ya había entrado en meta hacía un poco. Vinieron y enseguida me acabaron de curar la rodilla y el codo.
Una vez acabado esto, esperamos a la entrega de premios. Marcos, al que intenté pegarme cuando me caí, me dijo: "Alejandro, ¿qué tal? Menudo ost... que pegaste". "Sí, mira cómo estoy". Intenté doblar algo la rodilla. ¡Qué dolor! Al final, todo muscular.
Aprovechando que estaba por allí Fernando Lorenzo, me fuí a hacer una foto con él, que me hizo mi hermano. Me fijé que con él estaba el atleta que, sin querer, me había tirado al suelo, y él se fijó en mí. Cuando hicimos la foto, vino a hablar conmigo. Me pidió perdón. ¿Y yo qué, no le tenía que pedir perdón por el comentario que hice? Le pedí perdón y le comenté a Fernando lo que le había dicho. Fernando, tras un rato, me dijo "Alejandro, ¿sabes quién es este atleta?" "Sí que me suena muchísimo, pero ahora mismo no sé quién es". "Es Aníbal Rapado". "¡Andaaaaa!". En esta conversación me enteré de que Aníbal lee este blog. Fernando Lorenzo ya me lo comentó una vez en el Cross del Ajo, y desde aquí os mando un saludol. Seguimos hablando un poco y, luego, volvimos con mis padres. Aníbal, si lees esto, que sepas que te sigo pidiendo perdón por ese comentario. Cuando voy en carrera, cambio radicalmente y éso lleva a que suelte esas frases, de las que luego me arrepiento.
Pasado un rato, me fuí a hacer una foto con Aníbal y Sera, que estaban los dos juntos. Y, así, hasta que se comenzó con la entrega de tofeos. Hasta los Veteranos se dieron según iban acabando las carreras, así que ésto iría muhco más rápido. Lorenzo ganó, como no podía ser de otra forma. Sera también ganó. Una vez que hiberon entregado los trofeos a los Veteranos, se procedió a nuestra cateog´ria. Resulté ganador pese a lllevar la rodilla como la llevaba. Segundo el otro atleta que me hizo sudar y, tercero, Steven, también del Atletismo Zamora-Repostar.
Y así ha sido la última carrera del año. Dentro de dos semanas es La Rosca, pero, no sé si la correré, depende de cómo haya entrenado para entonces. Ahora, tengo pensado cambiar algo de deporte hasta que no se me quite del todo el dolor de la rodilla. Parece mentira, hace un año estaba corriendo esta misma carrera... Cómo ha pasado el tiempo.
Nos vemos corriendo.